Martes, 05-08-2014.- La Asociación Asturiana de Amigos del Pueblo Saharaui, en su condición de entidad organizadora y responsable del programa “Vacaciones en Paz” de acogida temporal con familias asturianas de niños y niñas provenientes de los campamentos de refugiados saharauis, programa que se viene desarrollando en Asturias de manera ininterrumpida desde hace ya 19 largos años, presenta su candidatura al Premio de Derechos Humanos del Ayuntamiento de Siero 2014, “sobre la base del necesario reconocimiento a los fines y objetivos del citado programa, que están claramente relacionados con la denuncia de la vulneración de los derechos humanos fundamentales de la población infantil saharaui refugiada”.
La justificación de presentación de la citada candidatura viene determinada además por la consideración de su posible encaje en los objetivos y fines contemplados en las normas que regulan la citada convocatoria. “El derecho humano fundamental que asiste a todo pueblo, es el derecho a la autodeterminación, es decir, a decidir libremente su futuro. Como consecuencia de la negación de ese derecho, el pueblo saharaui en general, y los niños y niñas en particular, en cuanto que estos constituyen la población más vulnerable de los campamentos de refugiados, llevan padeciendo desde hace ya 39 largos años las consecuencias de un largo exilio que les impide disfrutar del acceso a los mismos derechos humanos fundamentales para su desarrollo que disfrutan el resto de los niños y niñas de otras sociedades: vivir libres e independientes en el territorio que por justicia les pertenece y beneficiarse de los recursos naturales del mismo, el acceso a una vivienda digna, al desarrollo de sus capacidades, a una salud, educación y alimentación no dependiente de la Ayuda Humanitaria”.
La sociedad asturiana y sus instituciones han entendido la situación anteriormente descrita manifestando un apoyo solidario incondicional a lo largo de los 19 años de desarrollo del citado programa en Asturias. Han acogido en sus hogares y financiado solidariamente la estancia de cientos de menores saharauis a lo largo de todos estos años conscientes de la justicia que todos y todas les debemos y la paz que se merecen.
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