España, Marruecos, Argelia, Sahara Occidental, Pedro Sanchez,
El jefe del gobierno español, Pedro Sanchez no deja de sorprender a los suyos y a aquellos no son suyos. Si delante de los miembros del Congreso no paró de hablar de la presunta reconciliación con Marruecos y la nueva relación amistosa que les une, no ha mencionado ni una sola vez a Argelia en su largo discurso. Con eso bate todos los records de la falta de diplomacia y de tacto hacia el país que más gás vende a España.
El detalle no pasó desapercibido al igual que no pasó desapercibida la falaciosa argumentación para justificar lo injustificable : la traición hacia los saharauis y hacia el deber de España como potencia administradora de su antigua colonia. « Una violación de sus obligaciones legales, morales y políticas », según los terminos utilizados por el comunicado de la presidencia argelina en el que anunció la suspensión del tratado de amistad, buena vecindad y cooperación como represalia por la intervención de Sánchez ante el Congreso.
De esta manera, Argelia tensa aún más la cuerda con España y no oculta que no es más que el principio de las represalias destinadas a castigar al jefe de La Moncloa. Además de dejar de ser amigos, Argel decretó la congelación de todo el comercio exterior con España después de haber renunciado en abril a la compra de carne de ganado vacuno español. Cabe preguntarse cuando llegará el turno del suministro de gás. No parece que vaya a tardar. El invierno en España se anuncia tormentoso.
Para la opinión pública saharaui, la nueva diplomacia argelina colocará el conflicto del Sahara Occidental sobre el carril de una solución definitiva a favor del pueblo saharaui.
#España #Marruecos #Argelia #SaharaOccidental #PedroSanchez