El objetivo de estas organizaciones criminales es conseguir que la persona chantajeada acceda a sus peticiones (normalmente dinero a través de alguna manera de pago que no deje rastro) movida por el miedo a ver su vida arruinada al extenderse estas imágenes por todo Internet.
En los últimos tiempos se ha extendido de manera considerable una forma de chantaje sexual en la cual los criber criminales cuentan con contenido privado de los usuarios (normalmente fotos o vídeos) y la víctima es coaccionada para tener relaciones sexuales con alguien, entregar más imágenes eróticas o pornográficas, dinero o alguna otra contrapartida, bajo la amenaza de difundir las imágenes originales si no accede a las exigencias del chantajista. Este modo de proceder es lo que se conoce como «sexotorsiòn», un concepto procedente del término inglés «sextortion» y que se podría traducir como extorsión sexual.
El modus operandi de las organizaciones criminales que se dedican a extorsionar es la siguiente:
un usuario de redes sociales como Facebook recibe una solicitud de amistad de una mujer atractiva que sin ni siquiera tener amigos en común quiere establecer contacto.
En caso de aceptar la solicitud, esta abre un chat privado y la conversación empieza a subir de tono, intecambiando ambos fotos de contenido sexual y llegando a conectar la webcam para practicar “sexting”.
Es en este momento cuando se descubre que la persona que se encuentra al otro lado de la pantalla no es una atractiva mujer sino una organización criminal dispuesta a arruinarte la vida amenazando con publicar tus imágenes por todo Internet (foros, web de citas, etc.) e incluso enviárselas a tus amigos, familiares y entorno laboral. Ni siquiera es necesario que se haya enviado contenido sexual, ya que con un solo fotograma de la cara de la víctima los ciber delincuentes ya tienen suficiente para generar su propio material en el que, con un sencillo montaje de vídeo o foto, se simule que la persona que aparece en actitud sexual en las imágenes es el chantajeado.
El objetivo de estas organizaciones criminales es conseguir que la persona chantajeada acceda a sus peticiones (normalmente dinero a través de alguna manera de pago que no deje rastro) movida por el miedo a ver su vida arruinada al extenderse estas imágenes por todo Internet. Sin embargo, a pesar de que esto pueda ser difícil, la Policía recomienda no ceder a la presión y por tanto no pagar las cantidades exigidas, ya que, de lo contrario, ello podría suponer el inicio de otra pesadilla, pues en muchas ocasiones los grupos criminales, al ver que la persona cede ante la extorsión, van exigiendo cada vez más dinero, volviéndose la situación más insostenible.
En caso de que usted se encuentre en estas circunstancias estaría siendo víctima de un delito de extorsión regulado en el Código Penal, que dispone que «El que, con ánimo de lucro, obligare a otro, con violencia o intimidación, a realizar u omitir un acto o negocio jurídico en perjuicio de su patrimonio o del de un tercero, será castigado con la pena de prisión de 1 a 5 años, sin perjuicio de las que pudieran imponerse por los actos de violencia física realizados». Por tanto, las conclusiones a las que hemos de llegar es que en primer lugar hay que tener sentido común y sospechar cuando se nos presente alguna situación de estas características, pero en caso de llegar a ser víctima de estas organizaciones es aconsejable denunciar, pues se ha cometido un delito de extorsión ya se haya pagado la cantidad exigida o no.
Si ha sido víctima de este delito, puede contactar con abogados especializados en la materia para que puedan asesorarse sobre los pasos legales a seguir para protegerse legalmente.
Así mismo, si necesita asesoramiento legal para defenderse ante una denuncia o está siendo investigado por el delito de extorsión, necesitará asesoramiento legal prestado por abogados especializados.
María ingresa a su computadora, es de noche, la mejor hora para evitar la vigilancia de su madre… pero al ingresar a WhatsApp recibe una videollamada que le abre las puertas a un verdadero infierno, su infierno.
«Tengo tus vídeos y fotos sexuales, sino me envías (x cantidad de dinero) difundiré todo el material a tus padres y amigos». A la jovencita de tan solo 15 años le invade un temor que recorre cada milímetro de su adolescente cuerpo. Quedó al descubierto. Un completo extraño la tiene en sus manos.
María pudiera tratarse de un hijo, hermano, pero también puedes llegar a ser tú. Cualquiera que haya puesto en práctica el sexting, es decir, compartir su material sexual o erótico con un contacto, es presa fácil de la sextorsión.
¿De qué se trata la sexotorsión?
Internet es un universo que inició tímidamente en 1969. El acceso a la información es ilimitado, minuto a minuto millones de contenidos se difunden desde la Patagonia de Argentina hasta Australia.
No todos los cibernautas están en búsqueda de saciar su necesidad de culturizarse o establecer comunicación. Existe este grupo que son millones. Pero, mientras ellos leen, otros ponen en práctica estrategias tecnológicas para invadir la privacidad o recurren a engaños para incurrir en la sextorsión.
El caso de María es un ejemplo común de ese delito cibernético. Hay maleantes que «trabajan» solos o forman parte de una mega red de extorsión que viven del chantaje sexual. Amenazan a sus víctimas con difundir el contenido. A cambio de no hacer click, les exigen sexo o cuantiosas sumas de dinero.
Así se roban tus vídeos e imágenes sexuales
Las herramientas de tecnología se transforman en el peor enemigo del cibernauta cuando son aplicados en su contra. La sextorsión es uno de los mejores ejemplos en este caso. Para violar la privacidad de sus víctimas recurren a estos métodos:
El delincuente instala un spyware (Programa espía) en el ordenador o teléfono de la víctima. De esta manera tiene acceso total a su webcam o cámara.
2. Que el ciberdelincuente robe físicamente el smartphone o el ordenador para tomar de allí todo el material pornográfico.
3. Cuando la víctima, a través de técnicas de phishing (suplantación de identidad) descarga un malware (Software malicioso) que le roba el contenido del ordenador.
4. Establecen contacto con la víctima suplantando la identidad de personas atractivas. Luego de iniciar una amistad, empieza el coqueteo sexual, que luego se convierte en material para que el extorsionador comience la agresión psicológica y sexual.
Este tipo de delincuentes puede operar solo, pero también llegan a formar parte de una mega red dedicada a ese delito. Así fue el caso de la Reina de la Sextorsión. Esta mujer era el cerebro de una banda que amasó una fortuna a costa de sus víctimas.
Trascurría el 24 de enero de 2017 cuando la líder de esa organización criminal fue capturada por efectivos de Interpol. En Filipinas se logró la captura, pero la comisión de este delito traspasó las fronteras.
Gracias a los numerosos ciberdelincuentes captaron víctimas en diferentes países del mundo, Estados Unidos, Gran Bretaña, Australia, Hong Kong y Singapur, publicó La Iguana.
En este vídeo se explica paso a paso cómo operan estos ciberdelincuentes.
¿Por qué los adolescentes son las víctimas ideales para estos delincuentes?
«Ante las estrategias de chantaje (que se pueden dar en las redes sociales) los adolescentes no tienen la suficiente capacidad de reacción para pedir ayuda, y entran en una dinámica que tiene graves consecuencias», explica Jorge Flores Fernández, director de PantallasAmigas, una fundación no gubernamental dedicada al uso seguro y saludable de las Nuevas Tecnologías de la Información y de la Comunicación.
María, una adolescente (ficticia) de 15 años no resiste la presión psicológica y sexual que impone sobre ella el agresor. Decide quitarse la vida, lo ve como única vía de escape.Esta es la opción que han tomado algunos jovencitos que se sienten acorralados y sin ninguna posibilidad de escapar.
Esta extorsión se sufre en silencio. La vergüenza es el peor enemigo de quienes los sufren. Las víctimas experimentan un infierno de emociones. Alto grado de ansiedad, miedo, depresión, sentimiento de humillación y culpa, además de baja autoestima.
¿Quiénes son los sextorsionadores?
Puede ser un desconocido, un completo extraño, pero también hay altas posibilidades de que sea un compañero de estudios, trabajo o expareja. Evitar caer en las manos de estas personas inescrupulosas sí es posible, pero si se toman en cuenta una serie de recomendaciones.
Estrategias que te protegen de un extorsionador sexual
1.Nunca confíes en correos que puedan parecer de «origen extraño».
2. No hagas click sobre enlaces de procedencia desconocida.
3. Renueva con frecuencia la contraseña del email, del teléfono y de todas las aplicaciones.
4. Actualiza los softwares y sistemas operativos.
5. No conectes dispositivos de almacenamiento desconocidos en el teléfono móvil.
6. Instala un antivirus adecuado.
María puede ser un ser querido, pero puedes ser tú quien, por estar desinformado, puedes caer en en las redes de estos criminales que solo buscan lucrarse con el sufrimiento y la humillación de otros. ¡Toma tus previsiones!
¿Qué es la sextorsión?
Sexo + ¿extorsión?
Este neologismo tiene su origen en el inglés sextortion que según definía la Wikipedia (a fecha de 24/08/2010) es una forma de explotación sexual en la cual se chantajea a una persona por medio de una imagen de sí misma desnuda que ha compartido a través de Internet mediante sexting. La víctima es posteriormente coaccionada para tener relaciones sexuales con el/la chantajista, para producir pornografía u otras acciones.
Es decir, no tiene que ver necesariamente con la extorsión, que en castellano se suele usar únicamente para chantajes de carácter económico, pero al calcarse del inglés ha permanecido el término extorsión, por su fácil fusión con sex, y así se ha comenzado a utilizar por los medios de comunicación.
El chantaje se suele realizar por Internet, ya que asegura un cierto grado de anonimato al criminal.
«Ante las estrategias de chantaje [que se pueden dar en las redes sociales] los adolescentes no tienen la suficiente capacidad de reacción para pedir ayuda, y entran en una dinámica que tiene graves consecuencias.» — Jorge Flores Fernández, director de PantallasAmigas
Origen
Los primeros usos del término se remontan a la década de 1950 pero es en la era de Internet donde cobra de nuevo actualidad, al vincularse con uno de los ciber delitos más notoriamente vinculados al sexting, tal como reflejan los casos trasmitidos por los medios de comunicación.
Tipos de sextorsión
La sextorsión puede ser:
A menores de edad o a adultos.
Por medio de imágenes obtenidas mediante webcam, e-mail, mensajería instantánea, teléfonos u otros dispositivos móviles: es decir, por todos los medios que sirven para realizar sexting.
Por medio de imágenes obtenidas en el contexto de una relación sentimental.
Con objeto de un abuso sexual, una explotación pornográfica para uso privado, para redes pedófilas o comercial, una extorsión económica o cualquier otro tipo de coacción.
Puntual o continuada.
Realizada por conocidos, ex-amantes o personas desconocidas.
Internet
Fuente : Primicia Diario
Tags : Extorsión sexual, sextorsión, ciberdelincuencia, cibercrimen, chantaje,
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