Ouest Tribune, 06/03/2016 :
« En el Ministerio de Asuntos Exteriores donde el secretario general de la ONU ha estado impecable, la emoción era palpable, casi tan entusiasta como la expresada en Smara por los propios saharauis. Ban Ki Moon, sin duda, conservó de los saharauis una imagen indeleble. Y con razón, es el único pueblo en el mundo que vive una tragedia del pasado. Sin duda, supo valorar la magnitud del dolor de sentirse ocupado, colonizado por un país extranjero.
Como buen diplomático, no quiso reflejar un exceso de emoción, pero ayer en Argel se ha sentido bien que hay más voluntad en la determinación de lograr el referéndum de autodeterminación.
La satisfacción del SG de la ONU no vale, desde luego, una línea de crédito ilimitada, pero el reconocimiento de Argelia como potencia-socio de la ONU es de buen augurio, dado que el país ya está clasificado por varios actores internacionales como factor estabilizador en la región y un sólido socio para la paz en el Sahel y el Magreb. Este ideal posicionamiento todavía no ha tenido ningún impacto sobre la cuestión saharaui que sigue siendo la llaga del Magreb e impide su desarrollo y su entrada en el siglo 21.
« Efectivamente, es verdad que no he podido ir a Marruecos y que debí encontrarme con el rey de Marruecos en la primera etapa de mi visita ». Es la respuesta que Ban Ki-moon dió a una pregunta sobre el por qué de su cita perdida con el rey de Marruecos. Se diría que el Secretario General de la ONU no se esperaba este plantón de Mohamed VI. El resto de su respuesta lo muestra bien. « Desafortunadamente, el rey no estaba disponible, pero me aseguró que tendré la ocasión de reunirme con él, » dijo.
Estando cerca el final de su segundo mandato como Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, quiso intentar convencer a Mohamed VI para discutir con él la reanudación del proceso de descolonización de los territorios saharauis. Habría inscrito este paso en su trayectoria diplomática. Pero no pensaba, segúramente, que el soberano marroquí podría cerrarle la puerta de su reino sin ninguna vacilación ni vergüenza.
Tan sólo unos meses más al frente de la ONU y su segundo mandato terminará. Se le presiente como sucesora, una mujer conocida por sus competencias. La búlgara Irina Bokovo, actual directora general de la Unesco. Ya se declaró candidata para el puesto. Los medios diplomáticos del mundo la califican de favorita para dirigir las Naciones Unidas porque se dice que « es el turno de Europa del Este para hacerlo, sino América Latina ». A menos que surja un veto inesperado …
TSA – Algérie :
Una visita al territorio que no incluya una escala en Marruecos, fuente de todos los bloqueos, no puede aspirar a aportar elementos concretos que permitan solucionar el problema.
El Secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, llega este sábado al Sáhara Occidental para una visita anunciada como histórica. Será la primera vez que un secretario general de la ONU visite una localidad bajo control del Frente Polisario. Sin embargo, la visita tiene un carácter simbólico, porque el SG de la ONU no irá a El Aaiun ni a Marruecos, la potencia ocupante que paraliza todo progreso en el proceso de autodeterminación.
La visita de Ban Ki-moon deberá contentarse con su aspecto altamente simbólico en espera de ulteriores avances concretos. En paralelo, el Frente Polisario deberá contentarse con pequeñas victorias como la anulación parcial del acuerdo agrícola entre Marruecos y la Unión Europea.
Además, Marruecos no es el único que vela por el mantenimiento sostenible des statu quo en la cuestión saharaui. Dos miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, Francia y Estados Unidos, favorecen significativamente la posición de Marruecos y hacen ilusoria cualquier esperanza en el proceso saharaui. En el caso de Francia, la situación llama la atención más aún por el hecho de que el actual presidente, François Hollande, no tiene, aparentemente, el mismo grado de relaciones con Marruecos como su predecesor, Nicolas Sarkozy, siendo este último declaradamente un firme apoyo del rey marroquí Mohammed VI en la cuestión saharaui.
Según Abdelaziz Rahabi, diplomático de carrera y ex Ministro, esta visita está lejos de ser simbólica. El SG de la ONU apoya un proceso déscolonización. No hay que olvidar que la cuestión del Sahara Occidental está inscrita en la Cuarta Comisión, que es la de la descolonización. Consolida la posición de Argelia en la necesidad de reanudar las negociaciones entre saharauis y marroquíes en el marco de un proceso onusino. La actitud de Marruecos es una clara expresión de su deseo de no reanudar el proceso de negociación y mantener los territorios saharauis en el statu quo. La responsabilidad incumbe ahora al Consejo de Seguridad y a los Amigos del Sahara Occidental, entre ellos los Estados Unidos, Rusia, Francia, Reino Unido y España. Los miembros de este grupo, en particular Francia y España, tienen que asumir sus responsabilidades y ejercer presión sobre Marruecos para llevarlo a la mesa de negociación. El proceso está hoy suspendido a causa precisamente de que algunas potencias influyentes en este caso apoyan incondicionalmente a Marruecos alimentando su intransigencia.
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