El polisario acaba de asestar al Majzén una bonita bofetada que no olvidará durante mucho tiempo. Human Rights Watch reconoció haber trabajado en plena libertad y sin ningún tipo de compromiso, mientras que Marruecos se niega a darles luz verde para investigar en los territorios que ocupa en el Sáhara Occidental.
La primera constatación es abrumadora para Rabat : “En contra de lo que sostiene Marruecos, hay pocas violaciones de los derechos humanos en los campos de refugiados gestionados por el Frente Polisario”, dijo HRW añadiendo que “hay casos pero han sido exagerados por algunas partes”, en clara referencia a Marruecos, lo que equivale a tratar a las autoridades marroquíes de mentirosos.
Las libertades de opinion, asociación y movimiento están garantizadas por le Polisario. Hace lo mismo Marruecos?
El informe es una buena lección para Ban Ki-moom quien, bajo presión de Francia, puso durante mucho tiempos, al verdugo y la víctima en la misma baza en materia de violaciones de derechos humanos. Durante años, el SG de la ONU, en sus informes, colocaba al ocupante y el ocupado en la misma medida. Pero que importa? El pueblo saharaui está decidido a arrebatar sus derechos cueste lo que cueste. Las nuevas generaciones sólo esperan una señal para reanudar la lucha armada.
La constatación de HRW sobre la libertad de movimiento de los refugiados es otra paliza para el Majzen. Con esto, HRW dijo al mundo entero que los saharauis prefieren quedarse en el desierto argelino porque no están dispuestos a abandonar la reivindicación de sus derechos legítimos.
La organización humanitaria también reclamó que la MINURSO se encargue de vigilar el respeto de los derechos humanos tanto en Tinduf como en los territories del Sáhara Occidental que Marruecos ocupa.