Mahmud Haisan ha sido acusado por el régimen de « participar en una aglomeración armada ».
Un periodista y bloguero saharaui está detenido desde el pasado viernes, cuando fue arrestado por la policía marroquí en El Aaiún, en el Sáhara Occidental. Ha sido acusado, entre otras cosas, de « participar en una aglomeración armada ». Según han informado a Efe fuentes del Colectivo de defensores saharauis de los derechos humanos (CODESA),
Mahmud Haisan fue arrestado el pasado viernes tras haber participado en una manifestación independentista en la ciudad saharaui el pasado 30 de junio posterior al partido de fútbol entre Argelia y Alemania. La misma fuente indicó que Haisan, que ejercía de corresponsal para la televisión saharaui independentista « RASD TV », se le acusa de « aglomeración armada, espionaje para partes extranjeras y obstrucción de la vía pública », entre otros delitos.
Mahmud Haisan fue arrestado el pasado viernes tras haber participado en una manifestación independentista en la ciudad saharaui el pasado 30 de junio posterior al partido de fútbol entre Argelia y Alemania. La misma fuente indicó que Haisan, que ejercía de corresponsal para la televisión saharaui independentista « RASD TV », se le acusa de « aglomeración armada, espionaje para partes extranjeras y obstrucción de la vía pública », entre otros delitos.
Por su parte, fuentes de la Wilaya (gobierno civil marroquí) de El Aaiún dijeron posteriormente a Efe que Haisan « no es periodista porque no dispone de ninguna acreditación de prensa expedida por las autoridades », y añadieron que su detención se produjo « por participar en disturbios y causar perturbación en la vía pública », y no por otras razones. Las fuentes de la Wilaya dijeron desconocer si Haisan será presentado a la justicia o cualquier otra circunstancia sobre su situación actual.
El presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz, ha enviado una carta al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en la que denuncia que « el estado de ocupación marroquí trata de imponer el silencio total e impedir que los periodistas transmitan las prácticas represivas y salvajes de Marruecos », según recogió la agencia saharaui SPS.
La Gaceta, 09 julio 2014