Diario de un príncipe desterrado es el titulo del libro que se publicara el miércoles por ll Principe Hicham, primo hermano del Rey Mohammed VI, conocido con el nombre de Principe Rojo por sus criticas contra el régimen de Marruecos.
Con ocasión de esta publicación, fue entrevistado por el diario Le Monde y, por supuesto, interrogado sobre la cuestión del Sahara Occidental. Según él, la democratización de Marruecos podría aportar una solución al conflicto saharaui.
Voy a pararme ahí, porque si digo autodeterminación, vamos a entrar en calificativos de traidor a la patria, etc, dijo el Principe Hicham a propósito del Sahara. Une clara alusión a la mania del régimen marroqui de tratar de traidor a todo el que se oponga a sus tésis sobre el Sahara. A pesar de que Rabat siempre presento a este conflicto como un problema de todos los marroquíes, mientras que solo es causa del Majzén y de sus señores de Francia que le apoyan para seguís saqueando las riquezas naturales del suelo saharaui.
El pais preferido de los perversos franceses es conocido por sus posiciones contra toda critica a su politica y a su ocupacion del Sahara Occidental. El Principe de la Libertad y la Dignidad tenia buenas estrechos lazos con los periodistas del Journal Hebdo qui fueron obligados al exilio y su publicación cerrada bajo fuertes presiones fiscales y judiciales.
El reino de Mohamed VI, a menudo descrito mostrado por los franceses como modelo para los países africanos, es, para el Principe Hicham, una cita fallida con la historia. Es lo que dijo al diario Le Monde la víspera de la publicación de su libro. Una publicación que cae en mal momento para Marruecos que se encuentra bajo los focos de la comunidad internacional en la cuestión de los derechos humanos y el Consejo de Seguridad se dispone a atacar al tema saharaui en abril con motivo de la prorrogación del mandato de la MINURSO.
Hichal Alaoui afirma que Marruecos no progresara sin la abolición del Majzén que él califica de poder neo-patrimonial que impide el desarrollo económico et de sistema de predación y de subyugación. Para él, sin abolición del Majzén, la monarquía pagara el precio.
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