Mohamed VI pasará noches blancas estos días a causa de la presencia del Secretario de Estado americano en Argel.
El compromiso de John Kerry con la causa saharaui no es nuevo. Ya en 1990, envió una carta, co-firmada con eminentes senadores como Edward M. Kennedy que Alan Cranston, Bill Bradley y Paul Simon, al Secretario de Estado James A. Baker en la que dijo :
« Nos dirigimos a usted para instar a un mayor apoyo de los Estados Unidos en las negociaciones en curso bajo los auspicios de las Naciones Unidas entre el Gobierno de Marruecos y el Frente Polisario sobre la soberanía del Sáhara Ocidental. Marruecos y el Frente Polisario acordaron someter la cuestión de la soberanía del Sáhara Occidental a un referéndum reconocido internacionalmente y que será supervisado por la ONU. Las negociaciones están en marcha para llegar a un acuerdo que rija la retirada pacífica de las tropas marroquíes del Sáhara Occidental. Nos preocupa, sin embargo, el hecho de que sin un apoyo directo de EE.UU., el diálogo entre los países podría llegar a un callejón sin salida ».