El Frente Polisario como organización lleva muchos años en un estado reactivo, raras veces una mezcla de proactividad y reactividad. Para buscar un estado proactivo hay que remontarse a los años setenta y ochenta, años en los que el conflicto estaba en estado latente de alta ebullición, donde se cosecharon grandes éxitos. El estado reactivo actual, casi siempre hace que la organización no se anticipe a los acontecimientos, o no aproveche adecuadamente los acontecimientos favorables.
Marruecos actualmente se encuentra en una situación muy delicada, está en la cuerda floja como se dice coloquialmente, pero con sus últimos movimientos quiere hacer ver a la opinión pública que su posición sobre la cuestión del Sahara Occidental goza de buena salud.
La visita del rey marroquí Mohamed VI a los EEUU, el 22 de noviembre pasado, no ha cosechado los éxitos esperados, pero en vez de conformarse con el fracaso, lanzaron las campanas al vuelo, vendiendo la visita como un éxito, basándose simplemente en el comunicado oficial conjunto (por cierto manipulado por la MAP. marroquí) y la foto del saludo entre el Presidente Barack Obama y el dictador rey marroquí. Estos dos hechos no son más que actos protocolarios de rigor, y en verdad, su significado dista mucho de lo que el majzén pretende hacer creer a la opinión pública. La ofensiva propagandística marroquí no se hizo esperar, movilizando a todos los medios a su alcance, a sus lacayos, al lobby pro marroquí, a la prensa afín, comprando voluntades, etc., con el propósito de que cale el mensaje del éxito de la visita y que los EEUU de América apoyan su fracasado, irreal y cadavérico plan de autonomía, disipando así el tirón de orejas del que han sido objeto respecto a los Derechos Humanos.
Comparemos estos hechos con los ocurridos a posteriori, primero la visita del primer ministro Francés a Argelia el 16 de diciembre pasado, que se salda con un comunicado contundente que dice textualmente: »Ambas partes acogen con satisfacción el compromiso continuado de la ONU y de la comunidad internacional por una solución justa y duradera, sobre la base de una solución política mutuamente aceptable que permita la autodeterminación del pueblo del Sáhara Occidental ». Segundo, la foto de saludo entre el presidente de la RASD (República Árabe Saharaui Democrática) Mohamed Abdelaziz y el presidente los EEUU de América Barack Obama, en el funeral del Gran Nelson Mandela, esta imagen para el marketing político tiene un valor incalculable, si se utiliza adecuadamente. Mis felicitaciones al Sr. Mohamed Abdelaziz y a sus asesores en este sentido. Pongámoslos en una balanza, lo más probable es que la balanza se inclinaría a favor del pueblo saharaui, sencillamente porque si Francia, amo y señor de marruecos deja de apoyar a la dictadura marroquí, esta se vería obligada a cumplir las resoluciones de la ONU y por consiguiente su derrota definitiva en la cuestión del Sahara Occidental. Por otra parte el saludo entre el Sr. Mohamed Abdelaziz y el Sr. Barack Obama, aunque parezca informal, en cuestiones protocolarias las informalidades no caben de cara a la galería, por lo tanto esto es un revés para el majzén, dejando en segundo plano lo que habían vendido, el 22 de noviembre pasado y siguen vendiendo como éxito.
Ahora bien, tanto una cosa como la otra, no dejan de ser cuestiones protocolarias. Francia no dejara de apoyar al majzén a corto plazo sin ninguna contrapartida de peso, y los EEUU no reconocerá la soberanía del majzén sobre el Sahara Occidental, ni apoyara explícitamente el fracasado plan de autonomía (en el que no cree ni el propio majzén). Pero la diferencia estriba en que marruecos es experto en propagar bulos, contando con numerosos medios para ello, mientras que nosotros estamos escasos de medios y sin la agilidad de pensamiento lateral para nivelar la situación con todo a nuestro favor, en vez de explotar los acontecimientos que nos favorecen, lo que hicimos es despilfarrarlos, dejándolos en un segundo plano, y la diferencia está allí, al final los errores se pagan muy caros.
Quizás el caso más sangrante, es la reciente aprobación por parte del Parlamento Europeo del Protocolo de Acuerdo de Pesca entre la Unión Europea y Marruecos. Pongámonos en contexto, y comparemos los resultados de votación del año 2011 y la del año 2013, el resultado es el siguiente, en el año 2011 contamos con 322 votos a favor de suspender el protocolo frente a 296 votos, en el año 2013, 310 votos a favor del nuevo acuerdo y 204 votos en contra (a nuestro favor).
En esta votación, el estado Español ha jugado un papel muy activo beneficiando al régimen tiránico marroquí, de unos recursos que no le pertenecen y es más llenando las arcas del majzén (40 millones de euros anuales) para que adquiera material bélico y de represión para aniquilar o acallar los focos de resistencia saharaui. El gobierno español ha señalado en varias ocasiones que está velando por los intereses de los pescadores españoles, lo cual es demagógico, teniendo en cuenta que solo se cubrirán menos de mil puestos de trabajos entre directos e indirectos, lo que es insignificante en una tasa de paro de casi el 26%, cerca de seis millones de parados. Los interés son más bien de los armadores y del majzén necesitado de que se le de legitimidad sobre un territorio no autónomo invadido por la fuerza. El estado Español como era de esperar no ceja en su empeño de seguir apuñalando al pueblo saharaui, sin importarle el sufrimiento de los más de quinientos mil ciudadanos saharauis divididos por el muro bélico más largo del mundo (más de 2700 km), una parte en el exilio viviendo de la caridad internacional y la otra aún peor, en la pobreza casi extrema, bajo la represión marroquí.
Volviendo a la votación, me pregunto, ¿Qué ha sucedido, para semejante descalabro?, con solo conservar los votos del 2011, el nuevo Protocolo no habría salido adelante y es más, algunos parlamentarios que se abstuvieron o votaron a favor del Protocolo se consideran defensores de la causa saharaui, esto sencillamente es inaceptable. Marruecos no ha ganado el partido, sino que nosotros lo perdimos, esa es la diferencia. En fin, en este tema no todo está dicho, existe una clausula de respeto de los Derechos Humanos que marruecos incumple sistemáticamente, que habrá que hacer valer llegado el momento.
Por otra parte, creo que no se está aprovechando adecuadamente, una de nuestras mejores bazas actualmente, el reciente hallazgo de las fosas comunes (Informe Meheris: La esperanza posible). Hay que darle a este hallazgo más trascendencia internacional, y acusar formalmente al estado Marroquí (los responsables) y al estado Español de cómplice ante la Corte Penal Internacional, de genocidio (art.6), Crímenes de lesa humanidad (art.7) y Crímenes de agresión (art.8) y no quedarnos solo con la denuncia hecha en España por las asociaciones saharauis y pro saharauis. Marruecos como dije está en la cuerda floja, está en el ojo del huracán, y difícilmente puede salir indemne de la violación sistemática de los Derechos Humanos. En el pasado reciente ha sido objeto de numerosos informes de casi todas las Organizaciones Humanitarias (HRW, AI, RFK Center…), de la Unión Europea (informe Tannock), de la ONU (relator contra la tortura) y del Departamento de Estado de los EEUU. Todo esto nos favorece, pero nos toca a nosotros ser agiles, aprovechar totalmente los acontecimientos, darles toda la trascendencia que se merecen, e incidir donde más daño podemos hacer.
Con todo lo expuesto no estoy diciendo que no se ha hecho nada, realmente se han hecho muchas cosas pero algunos acontecimientos de gran trascendencia, no se trataron adecuadamente. El campamento de la Justicia y la Dignidad de Gdeim Izik, podía haber cambiado el curso del conflicto, si se hubiese tratado desde el principio con un enfoque más dinámico y estratégico, la farsa del proceso de los valerosos presos políticos de Gdeim Izik, las grandes manifestaciones de abril y mayo del año pasado, la manifestación del 10 de diciembre pasado, y un sinfín de acontecimientos más. El conflicto se está moviendo, y los saharauis ahora más que nunca debemos de encauzar todas las sinergias dispersas qué el Frente Polisario no es capaz de aglutinar, en organizaciones ó movimientos políticos complementario a este, para lograr nuestro ansiado objetivo, la independencia. Los movimientos (organizaciones) deben ser complementarios y no alternativos, así no se distorsionaría la legitimidad del Frente Polisario como único representante del pueblo saharaui. Por otra parte, esto obligaría al Frente Polisario como organización a dinamizarse y el majzén recibiría tantos golpes que no sabría por donde le vienen.
Mahayub Labaihat
Libres Opiniones, 17./01/2014