Las autoridades marroquíes han expresado cierta preocupación por la incorporación de algunos jóvenes marroquíes residentes en Cataluña al proyecto político de los partidos nacionalistas, los cuales aspiran a la instauración de una nueva república y a separarse de España. Una preocupación que se acentúa ahora por la decisión del gobierno catalán de celebrar el referéndum de la autodeterminación el 9 de noviembre.
De hecho, en las dos últimas manifestaciones de la Diada del 11 de septiembre en 2012 y 2013, la opinión pública marroquí mostró un amplio interés por la participación de centenares, por no decir miles de conciudadanos. En los numerosos videos e imágenes de las manifestaciones, queda mucho más que patente la presencia de marroquíes con su bandera nacional, además de banderas rifeñas.
Esta participación relativamente amplia de la comunidad marroquí y su apoyo a partidos de corte independentista como CiU y ERC no debe sorprendernos, ya que esta comunidad posee una importante base política, la cual se explica gracias a la labor llevada a cabo por partidos nacionalistas y sobre todo ERC, que se encargaron de abrirle las puertas a los marroquíes laicos, progresistas y nacionalistas del Rif. Además, hay que resaltar el peso que tiene la comunidad marroquí en Cataluña.
De hecho, cerca de 30 mil marroquíes tendrían derecho a voto en el caso de que se produjera referéndum del 9 de noviembre próximo. Por ello, el partido de Artur Más adoptó un lenguaje conciliador hacia los marroquíes a pesar de que su socio Duran i Lleida consideraba hasta hace poco a los musulmanes un peligro para la cultura catalana y rechazaba su participación en las elecciones municipales.
En una anterior crónica en árabe, Alifpost.com abordó este tema, subrayando que el consulado marroquí en Barcelona intervino para pedir, por no decir presionar, a los activistas marroquíes para que no se incorporaran al proyecto catalán, alegando que todo apoyo a la separación de Cataluña suponía un apoyo a la tesis del Frente Polisario en el Sahara.
Marruecos logró en cierta medida disuadir a algunos marroquíes de mantenerse a cierta distancia de los nacionalistas pero otros han optado por involucrarse totalmente. Este segundo grupo lo conforman sobre todo los inmigrantes del norte de Marruecos, los rifeños, que desde la instauración de la efímera república del Rif, liderada por el legendario Abdelkrim El Khattabi, ven en Cataluña todo un ejemplo, por lo menos como Autonomía.
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